Cárcel y resocialización (II)

Las prácticas de reclusión carcelaria vienen siendo objeto de diversas críticas y son la cara más visible del paradigma resocializador. La puesta en práctica de dicho dispositivo ha puesto en contradicción principios de dignidad humana, libertad de conciencia, de igualdad y oportunidad de trato y el panorama por demás desalentador de que en definitiva las cárceles no cumplen con aquello para lo cual estarían destinadas. Más aún, a mayor tiempo de prisionización peores son las perspectivas de reeducación del sujeto. Al observar la población carcelaria encontramos materializados las relaciones de poder y prácticas disciplinarias que posibilitan el control social de clase. Michel Foucault, en sus estudios sobre el encierro, realiza una revisión histórica de las técnicas de sometimiento y control de los cuerpos a lo largo de la historia como son el asilo, el manicomio y la cárcel. Para este […]

Cárcel y resocialización (I)

Desde tiempos remotos no se ha abandonado la idea de crear emergencias “penales” y de control de aquello considerado desviado. Desde el “mal cósmico y la brujería”, que justificaron en su tiempo la implementación de la Inquisición a la actualidad, la práctica penal es un intento de afrontar el desorden social. Toda norma conlleva una finalidad política y transcurre en un campo social de luchas de poder e intereses. La sociedad se trata en realidad de un verdadero campo donde los agentes y las instituciones luchan sistemáticamente por apropiarse de sus espacios. Al decir de Alberto Binder la norma es una práctica que desplaza a otra práctica anterior, constituyéndose en sí misma una forma de ejercicio de poder, que posibilita recursos para el interés singular de una comunidad jurídica aristócrata determinada. Las ciencias jurídicas, al igual que el conjunto de […]